Robles y Luna
(2007), mencionan que “los bosques de manglar son ambientes dinámicos y
complejos caracterizados por altos niveles de productividad primaria, que
constituyen áreas de refugio y crianza para una amplia variedad de peces y
fauna silvestre, y desempeñan un papel fundamental en la protección de la línea
de costa, la prevención de inundaciones, el mantenimiento de la calidad del
agua y la recarga de agua de los mantos freáticos”.
Querales,
Barboza, Briceño y Medina (2012), señalan la relevancia de exportación de materia
orgánica presente en los manglares, logrando suministrar alimento a una
diversidad de animales acuáticos como moluscos y cangrejos. Asimismo indican,
la importancia del suelo en la comunidad manglar y una alta densidad de raíces finas.
En este sentido, el Manglar refleja un papel imprescindible en los ecosistemas
naturales. Estrada, Cupul y Cupul (s/f), detallan la importancia del Manglar,
la cual radica en que son:
·
-Estabilizadores
de la línea costera,
·
-La
comunidad, o ecosistema, de manglar forman barreras contra huracanes.
·
-Son
hábitat.
·
-Es
la vegetación arbórea que se localiza en la de fauna silvestre.
·
-Funcionan
como filtros zona de mareas, en lo que corresponde a biológicos para mejorar la
calidad del agua, y ecotono entre el ambiente marino y el terrestre.
·
-Son
una fuente de nutrientes para ambientes de las regiones tropicales y
subtropicales de los terrestres adyacentes en regiones áridas.
Por
ejemplo, las especies Conocarpus erectus
(Mangle de botón) y Rhizophora mangle
(Mangle rojo) presentan unas
características importantes para el ecosistema y su protección. Estos
mangles pueden ser utilizadas como especies pioneras en la reforestación de
costas, en la formación de suelos, de igual manera, son fuentes de recursos
naturales, mantienen el hábitat de numerosos animales, crustáceos, moluscos,
aves, peces (Romero, Pozo, Timaure y Corro, 2011).
Las
personas que viven en las costas se benefician de estos, puesto que contribuye
a la producción de madera, carbón, obtención de peces y reptiles. De tal
manera, que a el Manglar se ha intentado de concederle más valorar. Sin
embargo, se ha evidenciado la reducción de estos bosques, a pesar de ser
considerados como los ecosistemas más importantes del planeta (Gossenlink y Mitsch, 2000., citado en Romero y col).
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