miércoles, 10 de agosto de 2016

Mayr. En qué tipo de mundo vivimos.




               La humanidad en la historia ha buscado responder lo misterioso, lo desconocido y enigmático acerca de nuestro(s) origen(s), el cómo llegamos presentar los rasgos que nos hacen humanos, en efecto las diversas culturas se han encargado, desde un principio en hacer estas preguntas, las tribus, el folclore de las distintas regiones han especulado sobre este evento. Mayr, expresa que las tribus humanas primitivas, han formulado y expuesta un sistema de creencias para, preguntas tales como: ¿Quién o qué dio origen al mundo? ¿Qué traerá el futuro? ¿Cómo hicieron los seres humanos? Dando respuestas tribales y orígenes de mitos celestiales. De tal manera, surgiendo una abrumadora cantidad de creencias acerca del origen del humano como homo sapiens y acerca de la historia natural.



            Mayr, señala que más tarde, los religiosos, asimismo filósofos, dieron respuestas a estas preguntas. Así, las categoriza en tres clases, a saber: (a) un mundo de duración infinita, (b) un mundo constante de corta duración, y (c) un mundo en evolución.
(a) Un mundo de duración infinita.

            Según Aristóteles el mundo siempre ha existido. Otros consideraban que el mundo era constante (nunca había cambiado), algunos pensaban que el mundo pasaba por diversas etapas, aunque en ultimo momento volvían a su anterior etapa (de allí que Mayr menciona la palabra “ciclos” para este pensar). 

(b) Un mundo constante de corta duración.
            Siendo la postulada por la visión cristiana, como lo manifiesta la Biblia. Fue la predominante en el mundo occidental en la Edad Media y a mitad del siglo 19. Su basamento se origina con la “presencia” de un ente todo poderoso (Dios), que había creado el planeta tierra, la especie humana, y la diversidad de las especies. Tal como lo describe el Génesis en la Biblia. Así pues, se formo el creacionismo. Un gran numero que mantienen esta posición, sostiene que Dios diseño al mundo con sus creaciones de forma perfecta. Los creyentes acerca deliberan que el planeta continúa siendo el mismo desde su creación. De hecho, los teólogos calcularon que la tierra había sido formada en el 4004 a.C.  De igual manera, historias similares las podemos ubicar en distintas culturas del mundo.

            A medida que las explicaciones lógicas florecían en la humanidad, estas hacían una ruptura cada vez más fuerte con la historia bíblica. La revolucionaria visión de Copérnico, no encaje con la lectura literal de los relatos. Abriendo paso a paso las observaciones científicas. En tanto la credibilidad de la visión cristiana (y otras religiones) fue debilitándose. La astronomía, geología, con sus observaciones y hallazgos científicos (como fósiles), explicaban que la edad de la tierra no era “tan joven” como lo consideraban.  A pesar de todo ello, la visión más o menos bíblica se mantuvo hasta 1859.
            Después de mucha controversia y de un fuerte arraigo teológico, las pruebas abrumadoras son evidentes. El mundo no es constante. “El resultado fue la propuesta y la eventual adopción de una tercera visión del mundo.”
 
(c) Un mundo en evolución.

            El mundo es prolongado o de larga duración, no es estático sino que siempre esta cambiando (evolucionando). A pesar, de la aceptación internacional del principio y hecho científico de la evolución, como nos relata Mayr, era un pensamiento extraño o no considerado por el occidente, a causa del dominio dogmático. Fue a través de acontecimientos durante los siglos XVII y XVIII para que fuera aceptable la evolución.  

"Evolution is change in the properties of populations of organisms over time."
Ernst Mayr 

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